El potente invierno canadiense no solo ocasiona accidentes en las pistas sino que también genera daños en las viviendas, y las tuberías de agua son muy afectadas en esta temporada porque terminan congelándose y esto puede dejarlo a usted sin agua o peor aún hacer que las tuberías exploten causándole costosos daños materiales.
Tome en cuenta estas medidas:
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Sepa dónde encontrar su válvula de cierre de agua (en caso de que sus tuberías estallen)
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Identifique las tuberías más propensas a congelarse y aíslelas con cobertores de espuma
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Selle las fugas de aire de su casa y garaje para evitar que el aire frío congele las tuberías
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Los grifos en el exterior de su casa son los primeros en congelarse: desatornille las mangueras, apague el suministro de agua del exterior y deje que los grifos drenen.
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A veces es preferible abrir ligeramente los grifos y dejar que fluya un chorro de agua por las tuberías para evitar que se congelen. Esto es incluso más económico que repararlas.
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Algunas personas colocan reflectores de luz cerca a las tuberías con la finalidad que permanezcan calientes.
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Mantenga la calefacción alta principalmente en áreas que contienen tuberías
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Abra las puertas de la cocina, baños, lavandería a fin de que el aire caliente circule por estos espacios.
Si usted abre el grifo y no cae agua, es probable que una tubería se haya congelado. Identifique cual es la tubería congelada y aplique calor en ella usando una almohada eléctrica para calefacción, un secador de pelo o una toalla caliente. No aplique fuego directamente porque puede generar un incendio.
Finalmente, si usted aun no consigue solucionar el problema o tiene la sospecha de una fuga no dude en contactar a un plomero para obtener sus servicios profesionales.